La parte metálica de la llanta se conoce como rin o aro. Esta pieza es la encargada de soportar el peso del vehículo y mantener la estabilidad en la carretera.
Los rines pueden ser de diferentes materiales, como aleaciones de aluminio o hierro fundido, y vienen en diferentes tamaños y diseños para adaptarse a diferentes estilos de vehículos.
Además de ser una parte funcional y crucial del vehículo, los rines también pueden ser un elemento estético importante para los amantes de los autos y se pueden personalizar con pintura o acabados especiales.