Los fármacos hipnóticos son medicamentos que actúan como inductores del sueño o sedantes, y se utilizan para tratar trastornos del sueño y la ansiedad. Estos medicamentos actúan sobre el sistema nervioso central, y su objetivo principal es reducir la excitación neuronal y modular la actividad del cerebro durante el sueño.
Los fármacos hipnóticos se clasifican en diferentes grupos según su mecanismo de acción; algunos ejemplos incluyen los barbitúricos, las benzodiacepinas y los no benzodiacepínicos. Los barbitúricos son fármacos que actúan directamente sobre el sistema nervioso, mientras que las benzodiacepinas y los no benzodiacepínicos actúan sobre ciertos receptores cerebrales.
Los fármacos hipnóticos pueden producir una variedad de efectos secundarios, como mareos, somnolencia y problemas de memoria a corto plazo. También pueden ser adictivos y causar dependencia, por lo que deben ser usados con precaución y siempre bajo supervisión médica.
En resumen, los fármacos hipnóticos son medicamentos que se utilizan para tratar trastornos del sueño y la ansiedad, actuando como inductores del sueño o sedantes. Estos medicamentos actúan sobre el sistema nervioso central, y su uso debe ser siempre supervisado por un profesional de la salud.