La señal de prohibido rebasar es una de las señales de tráfico más comunes en las carreteras. Su objetivo es evitar que los conductores adelanten o pasen a otros vehículos en situaciones peligrosas y reducir el riesgo de accidentes.
En general, esta señal se coloca en zonas donde las condiciones de la carretera no permiten adelantamientos seguros. Algunos ejemplos incluyen curvas cerradas, pendientes, intersecciones o lugares donde la visibilidad es limitada.
Es importante tener en cuenta que esta señal no solo se aplica a los automóviles, sino a cualquier tipo de vehículo, incluyendo motocicletas, camiones o bicicletas. Además, también se aplica a cualquier situación en la carretera, ya sea en una autopista o en una carretera rural.
Si un conductor ignora esta señal y decide adelantar a otro vehículo, puede ser sancionado con una multa y puntos en su licencia de conducir, pero lo más importante, puede poner en riesgo su seguridad y la de otros usuarios de la carretera. Por lo tanto, siempre es importante respetar las señales de tráfico y conducir de manera responsable en todo momento.